La Edad Media es el período que se extiende entre los siglos V y XV, aunque como en los demás períodos de la Historia, no es fácil establecer los cortes que la diferencien de la época anterior -la Antigua- o la posterior -la Moderna-.
El nombre de Edad Media fue propuesto por los historiadores de la Época Moderna, ubicada entre la Antigüedad clásica que admiraban y los tiempos Modernos, en los que ellos vivían. Estos siglos fueron llamados también los tiempos oscuros. Poco se sabía de su historia y se desvalorizaban sus creaciones culturales. Hoy en día,los estudios e investigaciones han avanzado y hemos aprendido a valorar los aportes de esta etapa, tan rica en sus expresiones artísticas, económicas y religiosas.
Los diez siglos de duración que tiene la Edad Media no significan un período uniforme. Entre los siglos VI y X, coexisten tres civilizaciones en el área mediterránea. A fines del siglo X, las invasiones sobre Europa marcan un cambio importante comenzando la etapa del feudalismo. A partir del siglo XII, en Europa se empiezan a producir los cambios que llevarán a la conquista del mundo.
LAS INVASIONES DE LOS SIGLOS IV Y V.
Durante mucho tiempo, el Imperio Romano fue asediado por los pueblos que vivían fuera de sus fronteras, y que de tanto en tanto incursionaban en su territorio, llamados germanos o bárbaros. Durante el siglo IV, las invasiones de los germanos fueron cada vez más frecuentes, empujados a su vez por los Hunos, un pueblo nómade procedente del Asia central. Todas las medidas para la defensa del Imperio no pudieron impedir que los bárbaros atacaran Roma en más de una oportunidad. Se fueron instalando pueblos como los francos, visigodos, ostrogodos, lombardos, vándalos, burgundios, sajones, anglos y alamanes. En el año 476, el emperador romano Rómulo Augusto fue destronado, marcando el fin del Imperio Romano de Occidente. En el territorio romano se crearon numerosos reinos, llamados reinos romano-germánicos. La parte oriental del Imperio, cuya capital fue Constantinopla, no sufrió estas invasiones.
Mapa Europeo luego de las invasiones:
LA EUROPA FEUDAL
Durante el siglo X Europa fue nuevamente asolada por pueblos invasores. Desde el norte y por mar, llegaron los normandos o vikingos; por el este los húngaros y desde el sur los sarracenos. Los europeos se sintieron amenazados por estos pueblos no cristianos.
No había ningún poder político capaz de enfrentar estas invasiones. Los reyes europeos empezaron entonces a subdividir sus tierras. La gente, campesinos en su mayoría, prefería buscar el amparo de alguno de los señores nobles que comenzaron a construir sus castillos para organizar su poder y su defensa.
La sociedad feudal
La sociedad feudal se configuró en Europa a partir del siglo X y muchas de sus características sobreviven hasta el siglo XVIII. Siendo un continente mayoritariamente cristiano, la organización social se explicaba por la interpretación de la Iglesia. En estos siglos se definieron tres grupos sociales (llamados órdenes) diferenciados por sus funciones, obligaciones y poder.
La Iglesia: el primer orden
Frente a los ataques de los invasores, los habitantes europeos se sintieron abandonados por sus gobernantes. No sabían a quien dirigirse en busca de ayuda y protección. La Iglesia aparecía como el único factor de estabilidad y continuidad. Así el clero se fue organizando como el primer orden: los que se dedican a la oración. Los monasterios se transformaron en lugares a donde la población recurría en momentos de escasez de alimentos o buscando protección. Muchos actividades fueron confiadas a la Iglesia, como la justicia o la enseñanza.
La nobleza: el segundo orden
La nobleza basaba su poder en la tenencia de la tierra y en la posibilidad de cobrar impuestos a los campesinos que vivían en sus campos. Acapararon el poder de los reyes que no podían formar un ejército eficaz para detener las invasiones. Conformaron así el segundo orden: aquellos que se dedicaban a la lucha.
Son dueños de un feudo, o sea, una tierra concedida al vasallo por su señor. Ambos son nobles y se establece entre ellos un contrato: el vasallo recibe del señor un feudo; a cambio, presta servicio militar a su señor.
Frente a los ataques de los invasores, los habitantes europeos se sintieron abandonados por sus gobernantes. No sabían a quien dirigirse en busca de ayuda y protección. La Iglesia aparecía como el único factor de estabilidad y continuidad. Así el clero se fue organizando como el primer orden: los que se dedican a la oración. Los monasterios se transformaron en lugares a donde la población recurría en momentos de escasez de alimentos o buscando protección. Muchos actividades fueron confiadas a la Iglesia, como la justicia o la enseñanza.
La nobleza: el segundo orden
La nobleza basaba su poder en la tenencia de la tierra y en la posibilidad de cobrar impuestos a los campesinos que vivían en sus campos. Acapararon el poder de los reyes que no podían formar un ejército eficaz para detener las invasiones. Conformaron así el segundo orden: aquellos que se dedicaban a la lucha.
Son dueños de un feudo, o sea, una tierra concedida al vasallo por su señor. Ambos son nobles y se establece entre ellos un contrato: el vasallo recibe del señor un feudo; a cambio, presta servicio militar a su señor.
El tercer orden
Todos los que trabajan forman parte del tercer orden. La mayoría son campesinos. Representan los 9/10 de la población europea. Viven en chozas de madera con techos de paja, agrupados en pequeñas aldeas cercanas a los castillos.
Entre los campesinos había cierta diferencia entre los que eran libres y los siervos o semi-libres.
Como los campesinos trabajaban las tierras del señor, debían pagar impuestos con una parte de la cosecha. Además, el señor exigía la utilización del horno, el molino o el lagar, que eran de su propiedad, por lo que debían pagar con una parte de lo producido. Los bosques también eran propiedad del señor feudal, por lo tanto también se debía pagar por su uso.
Además de todo esto, la Iglesia cobraba al campesino el diezmo.
Todos los que trabajan forman parte del tercer orden. La mayoría son campesinos. Representan los 9/10 de la población europea. Viven en chozas de madera con techos de paja, agrupados en pequeñas aldeas cercanas a los castillos.
Entre los campesinos había cierta diferencia entre los que eran libres y los siervos o semi-libres.
Como los campesinos trabajaban las tierras del señor, debían pagar impuestos con una parte de la cosecha. Además, el señor exigía la utilización del horno, el molino o el lagar, que eran de su propiedad, por lo que debían pagar con una parte de lo producido. Los bosques también eran propiedad del señor feudal, por lo tanto también se debía pagar por su uso.
Además de todo esto, la Iglesia cobraba al campesino el diezmo.
Gracias: http://www.profesorfrancisco.es/2011/03/la-edad-media.html
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